Mientras Boca Juniors esperaba en Mexico el partido contra Atlas, que le dio la clasificación a las semifinales de la Libertadores, el delantero “xeneize” vio en televisión que su gran amigo era figura en Chile al marcar tres goles a la “U”. El boquense relata la historia que los une y aún agradece que el “ruletero” le enseñe a manejar.
Ezequiel Miralles con tres goles fue la figura de Everton en el partido de ida ante Universidad de Chile. Una actuación que no solo aplaudieron los fanáticos viñamarinos. El delantero argentino de tiene en Boca Juniors un hincha particular: Rodrigo Palacio, quien en junio puede partir al Barcelona o al Sevilla, a cambio de unos 20 millones de dólares.
- Si le digo Ezequiel Miralles, ¿usted que dice?
- Miralles! Un gran amigo. Es un fenómeno. Miralles es mejor que yo.
- ¿Mejor?
- Si, mejor. Lo que pasa es que no tuvo suerte. Por algo la esta rompiendo en Chile, no cualquiera le hace tres goles a la “U”.
Palacio sonríe con la respuesta y guiña el ojo izquierdo antes de relatar a la tercera la historia de su amistad con el atacante de Everton. “todo empezó en Bahía Blanca. Yo soy bahiense y Ezequiel nació en un pueblito cercano, que se llama Algarrobo… yo jugaba para Bella Vista y él para Liniers, los dos de Bahía. En esa época nos conocíamos como rivales y nada más”, dice la figura de Boca.
La amistad nació a 185 kilometros de Bahía, en Tres Arroyos. “Fuimos juntos para jugar en Huracan, pasamos cosas lindas y nos hicimos muy amigos”, asegura Palacio.
Fueron artífices de la campaña que empujó a ese modesto Huracán del interior a la primera división, a jugar contra River y contra Boca. “yo jugué nada más que la primera rueda, todo el torneo del 2003. Y Ezequiel completo el campeonato. Yo no estuve en el Clausura 2004, porque me compro Banfield. Pero el día en que Huracán ascendió estaba en Bahía y me fui hasta Tres Arroyos para esperar a los muchachos y a Ezequiel”, rememora el atacante de Boca.
Respecto a la dupla que formaron, el “xeneize” dice que “nos complementábamos bien, a pesar de eramos de características parecidas, los dos rápidos. Pero Ezequiel era mejor que yo, te hacia bicicletas, metía fantasias, un gran jugador”.
- ¿Por qué Miralles no se afirmó en Argentina?
- No tuvo suerte. Pero llego hasta Racing, que no es fácil. Lo que pasa es que no hubo ningún técnico que le diera confianza y continuidad. Pero ahora en Everton le va muy bien. Y no tengo dudas que está para más. Puede jugar en cualquier equipo.
- ¿Cómo se entero de los tres goles que hizo?
- En Mexico, en la concentración. Estabamos en Guadalajara esperando el partido con Atlas, puse la tele y lo vi. Me puso muy feliz. Intente llamarlo, pero no lo pude ubicar.
- ¿Qué anécdotas tienen?
- Le debo mucho.
- ¿Por què?
- El me enseño a manejar en el auto de su papa, un Fiat Palio, cuando agarré confianza, ya salimos en un Fiat super Europa de i tia.
Y Palacio agrega otra historia. “En Tres Arroyos, el dinero no sobraba, había que ahorrar todo lo que se pudiera. Cuando nos volvíamos a Bahía Blanca para no gastar en pasajes nos íbamos a la ruta y hacíamos dedo hasta que algún camión nos llevaba. Festejabamos como si fuese un gol cuando alguno frenaba”.
Ezequiel Miralles con tres goles fue la figura de Everton en el partido de ida ante Universidad de Chile. Una actuación que no solo aplaudieron los fanáticos viñamarinos. El delantero argentino de tiene en Boca Juniors un hincha particular: Rodrigo Palacio, quien en junio puede partir al Barcelona o al Sevilla, a cambio de unos 20 millones de dólares.
- Si le digo Ezequiel Miralles, ¿usted que dice?
- Miralles! Un gran amigo. Es un fenómeno. Miralles es mejor que yo.
- ¿Mejor?
- Si, mejor. Lo que pasa es que no tuvo suerte. Por algo la esta rompiendo en Chile, no cualquiera le hace tres goles a la “U”.
Palacio sonríe con la respuesta y guiña el ojo izquierdo antes de relatar a la tercera la historia de su amistad con el atacante de Everton. “todo empezó en Bahía Blanca. Yo soy bahiense y Ezequiel nació en un pueblito cercano, que se llama Algarrobo… yo jugaba para Bella Vista y él para Liniers, los dos de Bahía. En esa época nos conocíamos como rivales y nada más”, dice la figura de Boca.
La amistad nació a 185 kilometros de Bahía, en Tres Arroyos. “Fuimos juntos para jugar en Huracan, pasamos cosas lindas y nos hicimos muy amigos”, asegura Palacio.
Fueron artífices de la campaña que empujó a ese modesto Huracán del interior a la primera división, a jugar contra River y contra Boca. “yo jugué nada más que la primera rueda, todo el torneo del 2003. Y Ezequiel completo el campeonato. Yo no estuve en el Clausura 2004, porque me compro Banfield. Pero el día en que Huracán ascendió estaba en Bahía y me fui hasta Tres Arroyos para esperar a los muchachos y a Ezequiel”, rememora el atacante de Boca.
Respecto a la dupla que formaron, el “xeneize” dice que “nos complementábamos bien, a pesar de eramos de características parecidas, los dos rápidos. Pero Ezequiel era mejor que yo, te hacia bicicletas, metía fantasias, un gran jugador”.
- ¿Por qué Miralles no se afirmó en Argentina?
- No tuvo suerte. Pero llego hasta Racing, que no es fácil. Lo que pasa es que no hubo ningún técnico que le diera confianza y continuidad. Pero ahora en Everton le va muy bien. Y no tengo dudas que está para más. Puede jugar en cualquier equipo.
- ¿Cómo se entero de los tres goles que hizo?
- En Mexico, en la concentración. Estabamos en Guadalajara esperando el partido con Atlas, puse la tele y lo vi. Me puso muy feliz. Intente llamarlo, pero no lo pude ubicar.
- ¿Qué anécdotas tienen?
- Le debo mucho.
- ¿Por què?
- El me enseño a manejar en el auto de su papa, un Fiat Palio, cuando agarré confianza, ya salimos en un Fiat super Europa de i tia.
Y Palacio agrega otra historia. “En Tres Arroyos, el dinero no sobraba, había que ahorrar todo lo que se pudiera. Cuando nos volvíamos a Bahía Blanca para no gastar en pasajes nos íbamos a la ruta y hacíamos dedo hasta que algún camión nos llevaba. Festejabamos como si fuese un gol cuando alguno frenaba”.
Fuente_: www.latercera.cl
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